No existe nada más tranquilizador que una mala persona. Nada tan predecible (siempre podemos esperar lo peor) y nada como esa sensación de superioridad o envidia que aplaca los ánimos de quienes tienen contacto con esa persona. Queda, para ellos, la tristeza; pero si no tuvieran la tristeza bien poco interés encontrarían en seguir respirando. Otro vicio confiable, como todos los vicios. En mi caso son sobre todo el cigarrillo y, aparentemente, escribir acá (suponiendo que podamos llamar "acá" a esta virtualidad ubicua y sin espacio).
***************************************************************************
(Prescindible e insoportable paréntesis filosófico que sabrán disculpar y también, seguramente, reprocharme)
Me parece ahora que el problema del vicio es sobre todo un problema de perspectiva. Hay espirales (por vertiginosas y abismales que sean) no dejan de parecer un círculo si uno las mira desde cierto punto de vista. Nietzche era exageradamente optimista. El círculo pierde; ganan la gravedad y la cruz (pero no la de el cristo, sino la otra, la implacable maquinaria de tortura cartesiana del x y del y).
Pero mejor lo dejamos para otro día porque todo esto (como dirían Les Luthiers) es tan profundo que yo mucho no lo entiendo.
(provisiorio fin del tedio)
***************************************************************************
Como que muy bueno tampoco soy, y como que ando medio escapado del trabajo para escribir esto. Y como que en realidad no tengo mucho para contar; o mejor dicho como que tengo demasiadas y cosas para contar y no mucho tiempo. Como que ya sé que todo esto es muy poco original, y que Charly García ya nació hace años aunque siga resucitando a pesar de todo (y a pesar de él mismo). Pero los vicios son así (como la vanguardia...)
Como que me despido por hoy.
Confío sabrán odiarme aunque sea un poquito. Y espero reincidamos en coincidir próximamente.
2 comentarios:
Mhmm... cigarro. Es bueno tenerte de vuelta! Escribe más y pronto.
Te extrañabamos, no lo vuelvas hacer, a pesar de todos, hasta de tu propio ser...
Publicar un comentario